Meses sin r

Si en una película de espías estuviese en entredicho la identidad de alguien que alegara proceder de Málaga, la mejor manera de disipar las dudas sobre tal condición sería preguntarle acerca de los meses sin r. En caso de titubear en la respuesta, no importa cuán perfectas sean las falsificaciones de sus credenciales: es un impostor.

Ha comenzado mayo, primer mes sin r, y ya arden las hogueras de madera de olivo ante el rebalaje, ya me entienden. Claro que no es el único indicio, otro hecho nos señala con precisión que se ha vuelto a completar el ciclo: la floración de las jacarandas del Jardín de los Monos. De modo que, cuando vayan de camino a Huelin o El Palo a lo que ustedes y yo sabemos, merecerá la pena pasar por la plaza de la Victoria. Hay que darse prisa, el espectáculo dura sólo un par de semanas.


Publicado en Diario SUR el 09/05/2021.

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